Nuestros padres y nuestros abuelos suelen decirnos que sus generaciones fueron jóvenes muy poco tiempo. Claro: aquellos que tengan entre veinte o treinta años, es probable que tengan todavía a esa abuela que les cuenta historias de una etapa del siglo XX muy cercana a la Guerra Civil española, mientras que su padre no escatimará en detalles sobre las responsabilidades de conseguir un buen trabajo, un coche, una casa pagada con hipoteca y, por supuesto, casarse y formar una familia. Hoy en día, sin embargo, los jóvenes lo son durante mucho más tiempo y, además, la mayoría de ellos se adscribe a la filosofía del carpe diem. Dicho así suena muy romántico, pero ¿por qué ocurre esto en realidad? No es por amor a la aventura, puesto que ya no estamos en una época de anarquía apasionada, como la edad de oro de la piratería. Tampoco sucede porque “los chavales de hoy en día sean unos irresponsables y solo piensen en sí mismos”, que es lo que suele pensar el adulto estancado en una época que ya no existe. En realidad, el motivo es muy simple: no hay seguridad.
Es así: todo implica dinero. Conseguir unos estudios es caro, independizarse del nido materno es caro, e incluso mantenerse a uno mismo es caro. Lo único que pueden hacer las personas de 25 años de media, por lo tanto, es vivir el momento; ¿para qué ahorrar si al final es probable que nunca se consiga tener una casa propia? Merece mucho más la pena gastarse ese mismo dinero en beberse una cerveza con los amigos un sábado por la noche. Ahora bien, creo que ha llegado el momento de ser un poco más positivos; y es que por muy diferentes que sean ahora las cosas, la realidad es que estos jóvenes, estos millennials, también tienen a su disposición herramientas que no tuvieron sus padres y madres. La más potente de todas ellas es, sin lugar a dudas, internet; y ha sido en ese enorme e interminable universo de internet en el que han florecido páginas como http://www.dineritoahora.es/minicreditos/ , que, conscientes de la situación actual, ponen a disposición de aquellos ansiosos de ser adultos al completo la enorme facilidad económica de los minicréditos.
Porque ahora, solicitar un pequeño crédito online puede salvar la vida de personas que quieren pagar el primer alquiler de su futura casa; una casa sin mamá y papá.
